En uno de esos dias donde tienes ganas de salir a recorrer los senderos del parque nacional Warairarepano y de paso encuentras en plena a ruta a un montón de amigos que haz logrado hacer mientras transitas por sus bastos caminos, me encuentro haciendo una pequeña parada para recobrar energias y esperar al grupo que nos acompañaba (bastante numeroso por cierto), especificamente en el punto que demarca el Asiento de la Silla de Caracas, la intersección entre el Pico Oriental, Pico Occidental y la subida desde No te Apures a unos 2300 msnm. Miro a mi alrededor y mi mayor sorpresa ver un grupo de pequeñas aves, muy inquietas por cierto, intentando obtener algo de alimento en la zona, un trozo de pan que al parecer habían dejado otros excursionistas, saco mi cámara e intento muy silenciosamente acercarme lo mas que pueda, y evitar de esta forma que las aves volaran. Sinceramente fue un reto hacer esta fotografia, la razón, las condiciones de luminosidad no eran del todo optimas, el cielo nublado casi que llego a caer una pequeña llovizna, y estos animales que no dejaban de moverse y brincar por doquier, aun así después de muchos intentos, una de ellas logro quedarse por espacio de menos de 1 seg. muy tranquila, como que sabia que no haría nada malo, sino más que retratarle. Fue un día fabuloso, que más puedo pedir si la pequeña ave «Literalmente Posó para mi».