Es domingo por la mañana, abro mis ojos a la espera de un mensaje que me indique cual será el plan del día, sin embargo este último no llega por motivos que desconozco, por tanto decido en último minuto, alistarme para ir a hacer algunas imágenes en la montaña. Mi idea era tomarme la ruta con calma para poder ver más y así fue. Pensaba hacer algunos macros de insectos, pero una brisa muy muy fuerte alteraba la tranquilidad reinante en los arbustos, así era casi que imposible lograr captar alguna mariposa en reposo. Mientras recorría el sendero que me llevaba hasta el punto de descanso, me topo con un cielo con pocas nubes, además de un colorido que no había visto en la zona. Dadas las condiciones climáticas la temática de la ruta cambio totalmente y pasamos de los macros al paisajismo, por supuesto sin dejar atrás mi tan apreciado filtro polarizado para descubrir un mundo lleno de tonalidades indescriptibles